En la era contemporánea, las empresas tienen que ser ágiles y responder a los cambios del mercado. Esto les exige supervisar constantemente sus métricas de rendimiento y hacer los ajustes pertinentes. En definitiva, es la forma de medir su situación, diagnosticar problemas y predecir escenarios futuros.

Uno de los principales errores que cometen muchas empresas es no saber cuáles son los KPI (Key Performance Indicators) clave para su negocio, por lo que es importante conocer la tipología de la empresa y tener siempre en mente algunas métricas.

A continuación se enumeran algunos de los indicadores clave de rendimiento para el crecimiento empresarial:

  • CAC, Customer Acquisition Cost, es decir, el coste de adquisición de un nuevo cliente. Este indicador debe mantenerse bajo control, ya que el precio de adquisición de un cliente es fundamental para la viabilidad del negocio.
  • ARPU, ingreso medio por usuario, es decir, el ingreso medio generado por un cliente durante un periodo de tiempo. Este KPI ayuda a analizar el crecimiento económico de una empresa.
  • Churn Rate o el número de clientes perdidos en un periodo de tiempo como porcentaje. Este ratio desempeña un papel importante en las empresas cuyos productos o servicios se rigen por un modelo de suscripción.
  • CLTV, Customer Lifetime Value, mide cuánto genera un cliente durante el tiempo que compra.
  • CAC PAYBACK, el tiempo que se tarda en recuperar la inversión realizada en la adquisición de un nuevo cliente.

Un indicador de que tu negocio goza de buena salud sería si el CLTV es superior al CAC, es decir, si los clientes a lo largo de su vida en la empresa aportan más beneficios que el coste de adquirirlos.

En resumen, vivimos en un mundo empresarial muy competitivo y cambiante en el que la innovación marca la diferencia. La forma de medir el crecimiento, la salud o el éxito de su empresa es tener claros los KPI de su negocio, ya que proporcionan información sobre los factores que son importantes para los objetivos estratégicos de la organización