Viajar por todo el mundo, por motivos de trabajo o para conocer nuevos destinos, descubrir paraísos naturales, visitar grandes ciudades, pueblos perdidos u otras maravillas del mundo.

Sin embargo, todo esto se ha visto paralizado en los últimos tiempos, debido a la crisis sanitaria mundial que estamos viviendo. ¿Qué puede hacer la hostelería ante este escenario adverso?

En primer lugar hay que reconstruir la confianza de los viajeros de negocios y de placer para que vuelvan a viajar, respecto a esta cuestión Zurab Pololikashvili Secretario General de la Organización Mundial del Turismo OMT afirma «Acelerar el ritmo de vacunación en todo el mundo, trabajar en una coordinación y comunicación eficaces sobre las restricciones de viaje en constante cambio, al tiempo que se avanza en las herramientas digitales para facilitar la movilidad, será fundamental para reconstruir la confianza en los viajes y reiniciar el turismo.»

Como señala la OMT, la vacunación y las soluciones digitales van a desempeñar un papel clave en la recuperación del sector. La vacunación sigue avanzando a buen ritmo, sin embargo la digitalización en el sector sigue siendo una asignatura pendiente para muchas empresas.

Las empresas del sector de la hostelería deben ser conscientes de los beneficios que la digitalización -el big data, la analítica avanzada y la inteligencia artificial en particular- puede aportar a su negocio. El sector debería aplicar estas tecnologías para ofrecer productos y servicios diferenciados y personalizados que satisfagan los requisitos y deseos de cualquier cliente individual.

La gestión de datos permite analizar y aprovechar al máximo los datos generados por los viajeros y los datos externos, como las previsiones meteorológicas y los eventos estacionales que afectan directamente a la hostelería. La aplicación de algoritmos de big data e IA a datos como la ubicación de las reservas, el origen de los viajeros, la edad, los gustos personales, las preferencias alimentarias, la información sobre vacunación, puede dar lugar a valiosos patrones y tendencias de consumo.

Esta información puede ser de gran valor para los propietarios de los establecimientos y ayudarles a mejorar las medidas sanitarias, gestionar mejor la capacidad y las reservas, minimizar las emisiones de CO2, optimizar el suministro de alimentos sanos y frescos y reducir los residuos para una gran variedad de huéspedes internacionales.

En conclusión, la tecnología permite a estos establecimientos mejorar la experiencia de los viajeros ofreciendo un servicio más personalizado, seguro y adaptado a la cambiante situación sanitaria. Esto puede contribuir a mejorar la confianza de los viajeros e impulsar de nuevo el sector turístico.