Las empresas farmacéuticas realizan grandes inversiones de dinero y tiempo para sacar un producto al mercado.

Según The Journal of the American Medical Association (JAMA), la inversión financiera necesaria para crear un medicamento y sacarlo al mercado ronda los 985 millones de dólares (incluidos los gastos en ensayos fallidos), y la inversión de tiempo es de unos 12 años, según Drug Approvals – From Invention to Market…

¡12 años!

La investigación farmacológica es un proceso científico que implica la recopilación, el intercambio y el procesamiento de ingentes cantidades de datos (fácilmente decenas de terabytes de datos cada día a través de experimentos científicos)..

La ingente cantidad de datos plantea el reto de cómo reducir el coste de su almacenamiento y gestión y cómo ayudar a los investigadores y colaboradores a trabajar de forma más eficiente.

La gestión de datos puede ayudar a reducir la inversión económica en el desarrollo de fármacos mejorando, por ejemplo, los resultados de los ensayos clínicos:

  • Identificación de los pacientes adecuados para participar en un ensayo mediante el análisis de datos demográficos e históricos
  • Crear un seguimiento remoto de los pacientes
  • Revisar los acontecimientos de ensayos clínicos anteriores
  • Identificar posibles efectos secundarios antes de que se produzcan realmente.
  • Reducir costes, ya que se realizarán menos ensayos.

Los costes también pueden reducirse si se dispone de una infraestructura de almacenamiento y datos más optimizada, evitando inversiones innecesarias en la nube.

La clave para reducir el tiempo de comercialización de un fármaco es gestionar los datos de forma centralizada y proporcionar una versión coherente de los mismos a todos los equipos y sistemas, lo que mejorará la eficiencia operativa de los equipos de investigación. Sin un programa de gestión de datos, estos equipos corren riesgos como:

  • Acabar utilizando versiones incoherentes de los mismos datos de referencia.
  • Creación de estudios duplicados en diferentes sistemas
  • Tiempo perdido en armonizar, mapear y coser datos.

Además de generar grandes cantidades de datos, el sector farmacéutico intercambia muchos datos entre equipos de investigación, universidades, laboratorios y organizaciones de investigación clínica y recibe los resultados de vuelta. Los datos que reciben pueden tener un formato diferente, contener valores no válidos o utilizar unidades de medida distintas (o inexistentes). Una vez más, queda claro que se necesita una solución de gestión de datos para preparar estos datos de modo que puedan visualizarse e interpretarse de forma eficaz.

En conclusión, una gestión inteligente de los datos y una forma de trabajar más centralizada que permita a los equipos acceder a los mismos datos en el momento oportuno y de forma que puedan visualizarlos, redundará en una reducción del coste y el tiempo de comercialización de un medicamento.